domingo, 23 de agosto de 2015

El mito de Iwa y Tigkishap

Ayu yamai, yaunchuk augmattai muun augmatujakajua nuna augmattsattajai: Iwa tigkishapjai. Augmatbauk aatus tawai: Duik muuntai iwa aentsun kuashat yuujaku asamtai tigkishap, machig, sumpa, weantu aina nuu aentsun ayamjukagtatus, egaajaku ainawai nuu yukagtin, iwa tawa nuna, wajuk maumainuk ainawa nuna. 
Nunik tigkishap aidau ijunag chichasag umikajui, tawai augmatbau, jintá, iwa aents egaku wetainum. Jii ikapajag yugkunawag jiijaku ainawai dutikam esak: Esakish esakish –tusa taku buchittai; wekemiag atijam: ¡Uchi!, datsa ajakua ímanuk wejaku tuajame.

Imaán batsatai iwashkam minau tuajame, chiikjin tsukapeaku nunik tanta, chichaak: 
–Tijagki waji imatiká batsamtajume –tusa iniimsauwai. 
–Apachi muun waigka ataktú uchimeaku imaan batsatji –tusa tiajui tigkishap aina nunu. Nunik: –Apachi ameshkam diistá –tusa. Makichik muuntush nui pekajaina nuiyan juki yugkunawag jiinum jiawajui, dutika jii patatug machik asa: Esakish, esakish, esakish –tutai japiki wekemiajui. Dutika atija diyam: ¡Uchi! ¡Niishkam wainkau! –Muuntush eketun yugkuna jiyam, uchi jiinki, nunu– Nuna wainak wakejukui, nunik iwashkam muun wajas wekaegau asa: Tijagki minash utugsagmek aika uchi, datsaush etiajum –tusa tiuwai. Tutai –Waa tame apachi ameshkam ibauk jiinmainitme –tusa tiajui. –ayu, minash wait aneasjum aika yugkuttsajum jituatajum, nunikan wisha uchi wajastajai –tusa tutai. –ayu apachi machik dakamsata –tusa chichainak: –amek apachi shiig muuntaitme nunin asamin tukumpin utitjai –tusa ashintukajui. 
Nunik yajuak ikaunmawag aitjag, muun asamtai, yugkuna shig jigkawag, iwanak juki jiinum patakajui. Chigkimnak umik batsamtuidau asag aan kuashat patatjag shiig senchi ekemaidau. Tuja dutikam esak: Esakish, esakish –wajau. Imatak kakau. Imanitaishkam antugtsuk jiin aan senchi patatuidau dutika tuukaja apeawag maawaju tuajame. 

Dutika wekemi atijag, tigkishap aidau chichainak: ¡Jah! ¡Apash jakajama! ¡Apash paan pegkeg diyaajai! ¡Apash yumain diittajai! –tusa tuidau. Tujash dekas apujiya duka: ¡Atsa, tsa, tsa, apash, apash; antigkaigpa, antigkaigpa; yuawaigpa, yuawaigpa –tusa tutai, pujus dii ijuntuidau. –Tsuwa, apash yumainajama, pegkejajama Apash –tusa, nejen ichigka juki esas diis; awa awajuinakua dekas yutan nagkamawajui. Yuagtai apujishkam: Tuiya –tusa taanta diis, yuagtai, niishkam pachiintuk yuawau tuajame, nunik tigkishap kuashat batsataidau asag, ijuntujag abukag ayatak ukunchish awasag idaisajui antsag tukum iwa yugkunamunak duka dukaá, tsaap awasajui. Dutikamu asa tukumpik yamaiya juish dukejakug tuke tsap aidaun dukejinai. Tigkishapchakam, iwa yuwau asa, yamaiya juish, nejenak tuke yuwai. 

IWA Y TIGKISHAP

En este momento, narraré una leyenda que desde antaño ha sido transmitida oralmente: Iwa y tigkishap. 
La leyenda cuenta que debido a que IWA era un antropófago, asesinaba a muchas personas para comerlas, diezmando así a la humanidad de aquel entonces. A raíz de esta situación y ante el peligro de su exterminio tigkishap, sumpa (lagartija), machig (mono), entre otros; buscaron cada cual la manera de asesisanar a IWA, con la finalidad de proteger a la raza humana. Para ello los TIGKISHAP, se reunieron y tomaron consejo con el fin de desarrollar un plan y así asesinar a IWA.

Al lado del camino donde IWA siempre solía pasar en busca de humanos, prepararon una gran fogata, trajeron cuanta leña pudieron y envolvían con hojas a sus amigos de edad avanzada, y luego lo hechaban al fuego. En cuanto se quemaba, se movía mientras gritaba: Esakish, Esakish, Esakish. Esakish era la señal para que lo sacaran. En seguida lo sacaban del fuego y lo desenvolvían, y he aquí, el tigkishap viejito, ¡Un jovencito! Tal como era antes. Hacían todo esto en espera de IWA. 
Y como era de esperar IWA venía trayendo consigo un bolson grande (Chiik). 
–Nietos, ¿qué están haciendo? –preguntó acercándose 
–Abuelito, ya que hemos envejecido, estamos volviendo a rejuvenecer; –respondieron los TIGKISHAP. Y agregaron: ¡Abuelo, tú también tienes que ver esto! Entonces imediatamente eligen a uno de los que estaban sentados allí esperando su turno, lo envuelven con hojas y lo colocan al fuego. A los pocos minutos, grita: Esakish, esakish, esakish. Sus amigos lo sacan y ante los ojos de IWA lo desenvuelven: ¡Y he aquí, un jovencito! 

Después de haber visto, sin poder contener su deseo, como también era ya de edad avanzada, no tardó en proponer: ¡Nietos también quisiera convertirme en jovencito, así como lo están haciendo! Y le responden: No hay ningún problema, abuelito, si se trata de eso estamos más que dispuestos, ¡También podrías rejuvenecer! –Entonces, les pido que me envuelvan con las hojas y me coloquen al fuego, para que me convierta en jovencito –acotó IWA. –De acuerdo abuelito –dijeron los tigkishap. Y agregaron: –Solo espere un momento abuelito, necesitamos traer hojas más grandes para ti, porque tú eres muy grande. Habiendo dicho esto se fueron y después de haber traído, lo envolvieron a IWA. Entonces le dijeron: Abuelito, cuando sientas que te estas quemando empezarás a gritar: Esakish, esakish. Lo tomaremos como señal para que te saquemos del fuego –agregaron. Y después de instruirlo, lo colocaron al fuego. 
Una vez que lo pusieron en el fuego empezaron a avivar la llama con más leña. Entretanto IWA empezaba a gritar: Esakish, esakish, esakish. Pero haciendo caso omiso al grito seguían avivando el fuego; entonces daba voces desesperados, con movimientos violentos: Esajai, esajai, esajai. Mientras continuaban avivando la llama y así hasta morir. 

Cuentan que así acabaron con la vida de IWA. Luego lo sacaron del fuego y lo desenvolvieron y se decían: ¡Bah! ¡El abuelito, ha muerto! –¡El abuelito parece estar exquisito!– decían algunos. Mientras otros comentaban: ¡Parece que se puede comer al abuelito! Respondiendo entonces el jefe dio una advertencia solemne: Ni se les ocurra tocar al abuelito, peor aun comerlo. Entretanto contemplaban el cuerpo. Sin embargo alguien de entre ellos dijo: Pero, ¿es que no lo podemos comer al abuelito? ¡Si el abuelo se ve exquisito! Habiendo dicho extendían la mano y tomaban un pedazo de carne y probaban, hasta que no pudiendo resistirse y empezaron a comer poco a poco, haciendo caso omiso la advertencia. Y como todos comían, el jefe levantándose dijo: Haber –como unirse al festín. Y entre todos terminaron la carne a tal grado que solo yacía el esqueleto. Desde entonces TIGKISHAP suelen comer carne, hasta ahora. 

ANALISIS DEL CONTENIDO

Vemos que la leyenda contiene una idea primaria y secundaria. Se nos dice que como la humanidad de entonces se estaba diezmando, alguien tomo la iniciativa para protegerla. Nos cuenta que ese peligro era un humano exterminando a otros humanos para saciarse. Aquí hay un mundo de materias y temas que desarrollar, eso incluye la responsabilidad hacia nuestros semejantes y nuestro único hogar, denominada: Tierra. Si en esta vida, el motor fuera vivir para saciar el hambre; hambre que cualquier humano lo poseemos, eludiendo la responsabilidad hacia nuestros semejantes y nuestro habitat, el resultado final que obtendremos será el caos, que en estos momentos la humanidad esta viviendo. Nos haría bien el hecho de recordar que el humano no es un ser aislado, sino que es un ente que vive en sociedad con sus semejantes y habitat, y aunque se pretenda ignorar las consecuencias de nuestros actos hacia nuestro rededor (mundo-humano), no nos libraremos de ellas. Si el tema principal es la responsabilidad hacia los demás, el secundario no hace más que direccionar nuestra mirada hacia nosotros mismos, 

Ahora volviendo a la leyenda veremos que lo que se relata aquí no esta basada en la adquisicion de una nueva vida renacido para la eternidad, vinculado a una divinidad; sino en llegar a ser como un joven, esto es en el aspecto fisico. La frase: ¡Un jovencito! Que se traduce de: ¡Uchi!. En el idioma inia, aislandolo de su contexto, literalmente quiere decir: niño, tambien es: bebé. Pero dentro de esta leyenda el lector debe entender que denota volver a adquirir el aspecto fisico de la juventud, incluyendo fortaleza y vigor. Esta es la diferencia notable que existe o el contraste con una cultura que busca lo espiritual. En este caso como es de notar con los INIAs al igual que con los SHUAR la pureza espiritual, la busqueda para agradar a alguna divinidad, el nacer de nuevo en espíritu, renacer para la eternidad, no forma parte de la cosmovisión. 

 VOCABULARIO 

ESAKISH. Este término proviene de la raíz ESAT que responde a tres significados primarios, a saber: verano, morder, quemarse (por la acción del calor). Pero ESAKISH no tiene paralelo en castellano, una traducción literal sería fuera de sentido para el lector, esto es: Se quema o quemándose. Por ello la traducción más cercana, con enfasis al contexto, sería: Me quemo, me quemo. 

ESAJAI. Quiere decir: me quemo. Este término se utiliza para denotar una acción en el pasado y presente, y también la acción de morder. Esto es: Esajai = me quemé, Esajai = me estoy quemando, Esajai = Lo voy a morder. El sonido de la pronunciación para ESAJAI que indica: “Me estoy quemando” y “lo voy a morder”; son iguales. Pero para: “Me quemé” es distinto. 

TIGKISHAP. Insecto, de cabeza gruesa, ojos prominentes, antenas finas, alas pequeñas membranosas, patas anteriores cortas y largas las posteriores, con las cuales da grandes saltos. Son herbívoras, también abundan en las casas, si no se controlan son perjudiciales, pues suelen comer carne, patarashca. Es muy común en la selva del Perú. 

IWA. Aun no se ha determinado con exactitud, quienes eran, pero en todos los cuentos aparecerá como un gigante antropófago. En otra leyenda aparece como uno que tenía esposa e hijos. 

CHIIK. Una especie de bolso grande que servía para guardar y transportar a una persona.

CRÉDITOS:
Historia contada por: Dukug Zoila Tijias
Transcripción y traducción: Ezequías Atamain
Edición: Liseth Atamain

9 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Gracias mi querida Lupe. Solía oir esta historia en mi infancia y aun ahora!!

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  2. También mi abuelito y me abuelita me contaba cuando yo era pequeño y de ello sacaba muchas enseñanzas

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    1. Oh, qué lindo. Hay muchas estrategias que rescatar de esta historia!!

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  3. Excelente. Muchísimas gracias por inlcuir el análisis.

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  4. Fantástico!! Qué lindo poder conocer las fábulas de la cultura Awajún.

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  5. Gracias por compartir la historia, nos ayuda a conocer más de lo nuestro.
    Ojalá sigas brindándonos más.

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  6. Me recuerda ami abuelita,cuando era un niño,me contaba hasta que me quedé dormido.

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